El hidrógeno verde busca resolver la ecuación del almacenamiento para consolidar su revolución
Empresas y centros de investigación exploran soluciones para desarrollar infraestructuras de déposito de este gas, tarea dificultada por su baja densidad
En la ruta para conseguir que el hidrógeno verde se convierta en un vector energético en los próximos años, se están desarrollando proyectos en toda su cadena de valor, no solo para abaratar y hacer escalable su producción, sino también para lograr nuevas soluciones que hagan viable y rentable su transporte, distribución y almacenamiento, que puede suponer hasta el 50% de su coste total. En esta última fase un conglomerado de empresas, asociaciones, centros tecnológicos y de investigación (como el CSIC), consultoras, ingenierías… estudian diferentes tecnologías: desde comprimir el hidrógeno a altas presiones (se ensayan depósitos para transporte de 1.000 bares), hasta guardarlo en acuíferos salinos, criogenizarlo a -253ºC o transformarlo a estado sólido. Innovaciones algunas más avanzadas que otras.